‘Tenbilal antsetik. Mujeres olvidadas’ es un posicionamiento contra la colonialidad de lenguaje
Los versos de Susi Bentzulul hablan de mujeres violentadas, silenciadas y de aquellas que buscan respuestas, pero su escritura es en maya tsotsil y con este trabajo la autora logra una doble rebelión: evidenciar las vejaciones contra la mujer y resistir a la hegemonía lingüística.
Con su poemario Tenbilal antsetik. Mujeres olvidadas, escrito en maya tsotsil y traducido al español, la escritora de origen chiapaneco hace una declaración contra la colonialidad del lenguaje que impone siempre el castellano sobre las lenguas indígenas.
“Era una manera de traer a la memoria o recuperar la escritura en tsotsil porque yo aprendí a escribir esta lengua hasta que ingresé a la licenciatura, sí lo sabía hablar pero no lo sabía escribir porque este sistema educativo sólo nos enseña a escribir y a leer en español, entonces es también como un posicionamiento político, una lucha, una resistencia contra este hegemonía lingüística que nos han impuesto”, comentó en entrevista con La Jornada Maya.
La poeta considera necesario hablar sobre las violencias que padecen las mujeres, no sólo de su comunidad sino de todo el país y todo el mundo. Y no habla exclusivamente de la violencia de género sino también del racismo y la discriminación.
“Tenía que hablar sobre estos temas porque son cosas que me pasaron a mí como niña, yo me enfrenté al racismo y es un cansancio acumular mucho dolor. La poesía me da la oportunidad de nombrarlo porque es algo que me cruza y que luego vi que mis abuelas, mis ancestras y mi mamá vivieron estas violencias también y digo que es necesario hablarlo porque luego se acumulan estos dolores en el alma.
“La escritura es la oportunidad de nombrarlas porque también al acompañar a otras mujeres víctimas de violencia, me di cuenta que también han vivido mucha discriminación, mucho racismo, violencia sexual.. Me di cuenta que muchas compartimos esa historia y que era tanto dolor acumulado que tenía que escribir, tenía que denunciarlo y tenía que visibilizar lo que nosotras estamos pasando”, manifestó.
Ver impreso su trabajo en su primer libro publicado provocó en Susi un encuentro de emociones, por un lado la satisfacción de ver materializado su sueño, pero por otro lado comprueba que muchas mujeres se sienten identificadas lo que significa que las historias de violencia son demasiadas.
“Ha sido muy doloroso y muy fuerte porque son muchas historias y duele que muchas mujeres me digan ‘yo me identifico porque a mí me pasó esto o me está pasando esto’. Es muy doloroso saber que la violencia no sólo está ocurriendo en ciertos contextos, sino que está en todo México, incluso en el mundo y no sólo desde hace años, estamos hablando de que en la actualidad violencia se sigue perpetrando en los cuerpos de las mujeres”, lamentó.
Tenbilal antsetik. Mujeres olvidadas ha servido para que Susi organice círculos de diálogos con niñas, con mujeres y hombres de las comunidades para hablar sobre temas de violencia con el fin de que no se repitan.
La escritora señala que su intención es que se hable abiertamente de estos temas para que las personas sepan que cuando algo está mal se debe denunciar.