El sitio, ubicado a 240 kilómetros de Progreso, está conectado con Arrecife Alacranes
En las profundidades del Golfo de México se encuentra el arrecife Bajos del Norte, un espacio de más de un millón de hectáreas de zona marina que alberga una gran diversidad de especies, muchas de las cuales garantizan la seguridad alimentaria de más de tres mil familias pertenecientes a las comunidades pesqueras de la costa de Yucatán.
Este arrecife, ubicado a 240 kilómetros de Puerto Progreso, acaba de ser decretado como Área Natural Protegida, lo que significa que los gobiernos deben comprometerse a conservar todo el ecosistema y los seres que lo habitan.
La Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) solicitó la declaratoria que ahora le otorga el nombre de Parque Nacional Bajos del Norte y destaca su relevancia como zona de reproducción y crecimiento de diversas especies.
El sitio es ahora el Área Natural Protegida más grande del Golfo de México. Su importancia se debe a que contribuye al equilibrio de nutrientes y de la conectividad genética así como al intercambio biológico de las especies arrecifales, especialmente las de valor pesquero.
Además, los corales presentes en este ecosistema proporcionan beneficios como la fijación de nitrógeno y control de bióxido de carbono, lo que contribuye a que se produzca biomasa marina y su protección permitirá salvaguardar estas funciones ecológicas.
La organización no gubernamental Oceana celebró como una victoria este decreto al considerar que es un hito histórico en la conservación marina.
Oceana destacó que Bajos del Norte está formado por colonias de corales diversos que son el hogar de miles de especies marinas. Además, es una de las principales áreas de reproducción de meros, un pescado ampliamente consumido en la península de Yucatán.
El nuevo Parque Nacional está conectado con Arrecife Alacranes, otro de los ecosistemas más importantes de Yucatán.
“El sitio Bajos del Norte forma corredores biológicos activos con el contiguo Parque Nacional Arrecife Alacranes, cuyos procesos ecológicos se encuentran ligados por medio de un sistema de corrientes marinas, lo que representa un flujo continuo de biomasa larvaria de gran importancia para el mantenimiento de poblaciones de peces, moluscos y crustáceos, incluidos el mero, el pulpo y la langosta”, destaca el decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación del 8 de enero.
Las acciones de conservación también incluyen la regulación del acceso pesquero a las zonas de reproducción y acciones preventivas de restauración y protección de los corales.
Para poder estudiar el arrecife, el equipo de Oceana realizó el levantamiento de imágenes que permiten la creación de mapas 3D para que científicos de todo el mundo puedan estudiarlo sin la necesidad de acudir al lugar.
“Con estos mapas se tendrá más certeza sobre el estado y salud de los arrecifes en la zona de Alacranes y Bajos del Norte. Esta es la primera vez que una técnica como ésta se aplica en los arrecifes de México”, destacó Oceana.
En este video puedes conocer más del trabajo que realiza Oceana en Arrecife Alacranes y en el Parque Nacional Bajos del Norte.